Especialidad en cocina fusión. Menú degustación 55 euros sin bebida.
Perú, Madrid (Kena y Kirikata, Grupo Arzábal)… Plazas en las que ha oficiado el chef Luchín Arévalo que desde hace tres años cataliza, con estilo personal, lo que degustaríamos en Japón, Corea, China o Indonesia. Para muestra, ‘botones’: dumplings o gyozas ibéricas o de gambas; woks, tempuras y delicatessen de concepto fusión nikkei. La sensación, nada más traspasar el umbral, es la de mimetizarnos con el interiorismo, la cocina vista, la estilizada barra y, claro está, la solvente propuesta culinaria. La placidez de tal atmósfera refuerza, pues, el deleite ante propuestas al horno robata como el tataki de vaca o la costilla cantonesa. Error manifiesto si no probamos el souflé Mumbai o la fondant de té Matcha.
¡Buen apetito!
Guía qué bueno