Excelente bodega próxima a las 1.000 botellas | Aparcamiento gratuito
De cocina fresca y apetecible, está en el corazón del Muelle Deportivo con terraza codiciada y “risottos” inolvidables: hay dos que son una gozada, el negro con alioli gratinado y gambas, y el del bosque trufado con boletus y espárragos trigueros. La enorme afluencia de público evidencia el encanto del equipo que lo compone, dirigido por Javier Roldán (propietario), que consiguió hacer del local uno de los notables de la ciudad. Da gusto disfrutar del alegre servicio que siempre sugiere algo para picar (el jamón es de primera), pero también el vino apropiado para la carne, el pescado o los mariscos gallegos. No pase por alto las sugerencias con productos de temporada, ni la tarta de queso con maracuyá.
¡Buen apetito!
Guía qué bueno